Pedro García

En la final de la Concacaf en el clásico Rayados y Tigres el próximo miércoles, el secretario estatal de Seguridad, Aldo Fasci, recomendó para evitar la violencia:”El que pierda que aguante vara y al que gane que le baje dos rayitas”.

Esa es la petición que hace a las barras de ambos equipos y reiteró que no se permitirán las caravanas rumbo al estadio del Monterrey por parte de las porras.

El funcionario dice que  tendrá que existir un ganador y los festejos podrían salirse de control por lo que reforzarán la seguridad durante el encuentro y al final para vigilar a los ganadores y a los derrotados.

Fasci cree que previó al partido probablemente los aficionados se reunirán en algunos puntos pero los disolverán para que lleguen todos por individual al estadio.

“La salida es la que más nos preocupa, habrá un ganador Indiscutiblemente y tenemos que llevar la fiesta en paz, el que pierda a aguantar vara y el que gane bájele dos rayitas, no sean gachos.

“Se va a repetir todo el esquema, prohibidas las marchas; no están por la ley pero es un acuerdo, sí, se juntaron, iban en caravana  y los desviamos. Nuestro trabajo lo haremos bien como lo hicimos en San Nicolás, los llevaremos por un ladito”.

Un acuerdo de octubre pasado impide a las porras o cualquier grupo reunirse en un punto de la Ciudad y partir en caravana al estadio.

En septiembre pasado en el clásico 117 un hincha del Tigres casi muere al ser agredido por barristas de los Rayados de Monterrey.

En el juego de ida en el estadio de Tigres el martes, la porra La Adicción del Monterrey hizo caravana y aunque la policía trató de disuadirlos no lo logró y los escoltó al estadio.

Ello ha provocado que la directiva de Tigres pida que se sancione y se vete a la porra rayada de acuerdo al pacto que se hizo en octubre pasado tras la violencia del clásico 117.