Pedro García Treviño
Como decíamos hace décadas, desplegaron un futbol argentinizado, lento, en la delantera un jueguito individualizado sin un propósito de efectividad.
En el detalle, Lainez, apenas tomaba el balón y empezaba a driblarse así mismo, por ejemplo. Figueroa, que entró de cambio, igual, puro caracoleo y nunca mandó un servicio al área.

Decían los cronistas y comentaristas que los japoneses se impusieron por su idiosincrasia quesque la honorabilidad. Nada qué ver.
Coincido en la disciplina táctica.
Nada nuevo: el futbol es de asociación, toque de primera, visión de juego, saber dónde está un compañero cerca o mejor colocado y etcétera, etcétera.
También dijeron que hubo jugadores que arribaron dos o tres días antes. Bueno, el entrenador debió integrar un grupo de Hombres, no nombres..Éstos en el último recurso, teneros de cambio.
En fin.