vie. Mar 29th, 2024

En la traducción hebrea, Adán es el nombre dado al hombre que representa la humanidad, no necesariamente al varón.

Cuando la serpiente ofreció a Eva comer del fruto prohibido para ser como Dios, le dijo que no morirían, porque conocía el poder de la unión de Adán y Eva y buscaba destruir a la humanidad.

A causa del pecado, la humanidad se infectó de muerte, y así como Adán y Eva no cayeron muertos en ese instante, el efecto crónico-degenerativo sí fue inmediato y a partir de entonces, comenzamos a morir.

La humanidad está condenada a muerte por la virulencia del pecado y por esas voces que nos siguen haciendo creer que no moriremos si desobedecemos a Dios. 

Adán murió y nosotros con él también.

Desde el principio, es Dios el que ha estado persiguiendo al hombre para salvarlo de sus propias malas decisiones y rescatarlo de la muerte, mientras el hombre huye de él.

Nietzsche se equivocó, aunque a Jesús lo mató la humanidad, no se quedó muerto, Él resucitó para dar vida.

Aunque el primer Adán murió, un nuevo Adán se levantó en la figura de Jesucristo; el primero, un hombre con vida; el segundo, un espíritu que da vida y ofrece redención a quien se la pida.

Si la muerte te ha infectado, no huyas avergonzado, Dios te está buscando para salvarte.

¿Crees esto? Habla con Dios, lee la Biblia y descúbrelo.  Solo la Verdad te hará verdaderamente libre.

Gn.3 | Gn. 5:5 | 1 Cor. 15:45 | Jn. 3:16

Contacto: 

Email mujervirtuosa@instruccionespersonales.com
Facebook https://www.facebook.com/InstruccionesPersonales 

Instagram https://www.instagram.com/instruccionespersonales/ 

Whatsapp: https://chat.whatsapp.com/IvEOo3fLUPB760llpNegXy     

Telegram: https://t.me/joinchat/GadGUwf0PUjYH44I 

Por Admin

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *