Por Rogelio Romero/Deportes
El Real Madrid tiene un partido difícil este fin de semana, cuando enfrente al Barcelona por el liderato de la Liga Española.
Las críticas comienzan de nuevo a sentirse en el banquillo realista después de dos derrotas consecutivas, primero ante el Levante en liga por 1-0 y después en casa durante Champions, recibió al Manchester City cayendo 2-1.
El entrenador, Zinedine Zidane, ha tratado de sobrellevar las cosas y aunque se ve tranquilo ante la prensa española, otra cosa es en la cancha donde la estrategia no ha funcionado.
Por su parte, el Barcelona de Quique Setien, viene de un sorpresivo empate como visitante ante el Nápoles italiano donde milita el mexicano Hirving “Chuky” Lozano.
La escuadra italiana sacó la garra y logró que los barcelonistas no les madrugaran en su cancha, ahora pagarán la visita al cuadro español.
Ni Leonel Messi en su primera visita a la cancha napolitana pudo sacudirse el fantasma de su compatriota Armando Maradona, quien es un icono en esta ciudad italiana, donde vivió momentos de gloria tras corinarse campeón.
El entrenador napolitano, Gennaro Gattuso, ha mandado a la banca al mexicano Lozano con la excusa de que tiene que “aplicarse” más en su trabajo deportivo, y sentenció que no lo contempla para jugar en Champions.
¿Qué tanto pesa todo esto sobre el Barcelona? Pues primero muestra a una escuadra impredecible sobre la cancha, no se sabe si la alineación que salga al campo viene realmente decidida a llevarse la victoria frente al Real Madrid, si sus delanteros saldrán finos en busca del gol, en todo caso si aparecerá la genialidad de Messi para definir el partido.
Real Madrid ha tenido una semana de concentración intensa preparándose para este juego, ambos equipos se juegan el liderato del torneo español, se espera un juego cerrado, donde las defensas cedan poco espacio y las oportunidades de gol sean contadas.
Una tercera derrota de los realistas madrileños en forma consecutiva, sería un descalabro estrepitoso y hará pensar a la directiva, si Zidane merece o no quedarse como entrenador para la próxima campaña