Gloria seria categoría 3 esta semana
Por Rogelio Romero
Brownsville, Texas.- El gobernador de Texas, Greg Abbott emitió una declaración de desastre para 23 condados ubicados en la costa del golfo de Mexico, como prevención a las torrenciales lluvias que podrían dejar a su paso en los siguientes días, los huracanes Marco y Gloria.
La declaración de desastre incluye las áreas de población de Aransas, Bexar, Brazoria, Calhoun, Cameron, Chambers, Galveston, Hardin, Harris, Jackson, Jaspers, Jefferson, Kennedy, Kleberg, Liberty, Matagorda, Newton, Nueces, Orange, Refugio, San Patricio, Victoria, Nueces y Willacy.
Aunque los modelos de impacto en tierra relacionados a ambos fenómenos naturales los ubican con mayor alcance y peligro para la franja costera que va de Houston al vecino estado de Luisiana.
La medida preventiva emitida por el gobernador significa que los pobladores de esos 23 condados en caso de ser impactados por las lluvias o fuertes vientos de los huracanes, tendrán la asistencia inmediata que requieran entre ello albergues donde pernoctar, asistencia de la guardia nacional y ayuda financiera estatal y federal para reparar sus casas si resultan dañadas por los ciclones.
El condado de Cameron donde se ubica el puerto de Brownsville, fue incluido dentro de la declaración de desastre adelantada por el ejecutivo estatal.
De acuerdo al Centro Nacional de Huracanes con sede en Miami, algunos condados de Texas podrían verse afectados por una prolongada secuencia de lluvias torrenciales que podrían durar días, esto debido a la cercanía de ambos fenómenos naturales y más aún si Gloria se convierte en huracán categoría 3, cuando este cerca de ingresar a tierra.
El área costera de Houston es la que se encuentra en la posible zona de impacto hasta ahora de Marco y Gloria, pero la amenaza es más fuerte para Luisiana y Mississippi, según la mayoría de los modelos de trayectoria de ambos ciclones.
Si las torrenciales lluvias afectan por días a Houston su deficiente sistema de drenaje será puesto a prueba de nuevo por un fenómeno natural.
En los últimos 4 años la administración del alcalde Sylvester Turner ha venido corrigiendo los problemas del drenaje pluvial citadino, pero se ha topado con detalles y problemas técnicos o urbanos que requieren de más tiempo para ser resueltos.