Por Rogelio Romero
Las cúpulas políticas comienzan a moverse buscando acaparar la atención del electorado y plantear que el rumbo del país se ha perdido.
Desde clérigos, periodistas, intelectuales y políticos que son parte de un movimiento de derecha que ya asoma la cabeza, se recrudecen los ataques y críticas contra el presidente de la República, tal vez, el más popular en los últimos sexenios.
Octubre el mes de decisiones políticas para muchos que quieren ser candidatos a gobernador o tratar de ganar una diputación federal, ira aclarando el panorama para saber que personajes serán contendientes en las elecciones del 2021.
La derecha habla de alianzas no importa con quien o si los programas políticos coinciden o no, lo que interesa para el PRI, PAN, MC y PRD es avanzar hacia un proyecto que sea capaz de hacerle frente a MORENA, principal fuerza política al frente en las encuestas a pesar de la crisis económica y salud que ha dejado la pandemia del coronavirus en México, al igual que en otros países.
MORENA se encuentra enquistado en una batalla política interna por definir a su dirigencia nacional, sea cual sea el resultado de esta contienda interna no se espera una desbandada partidista, concluida la elección los grupos de poder se enfocaran en negociar sus zonas de influencia.
El presidente Andrés Manuel López Obrador volvió a criticar las pugnas internas que existen en su partido, normal en cualquier democracia pero una vez definida la dirigencia morenista las fuerzas internas volverán a alinearse, porque saben que si existe un peligro en la posible “alianza política” que se cierne en la derecha mexicana.
AMLO es atacado, criticado e insultado por todos los flancos por los grupos opositores a su gobierno, pero como viejo lobo de mar a capoteado todos los ataques incluyendo el “escándalo mediático” que causó el video de su hermano Pio.
El presidente sabe que MORENA tiene que definir su rumbo político y que la dirigencia electa, tiene la tarea de enfocar sus esfuerzos en convencer al electorado de que son opción de gobierno.
Los tiempos políticos han comenzado y al igual que en otros estados del país seguiremos viendo en Nuevo León el paso de políticos como Dante Delgado y el “resucitado” Jesús Zambrano, hablando de posibles alianzas políticas para confrontar a MORENA en las elecciones del 2021.
Nuevo León y Chihuahua son 2 de las plazas que podrían perder los grupos políticos de derecha, pero por más que critiquen al presidente López Obrador o al mismo movimiento morenista, los cuestionamientos de la sociedad civil para quienes gobiernan actualmente ambas entidades serian; ¿Por qué votaría en contra de ellos la ciudadanía?
¿No será más porque los propios ciudadanos están cansados de ver que no hay soluciones reales a los graves problemas urbanos, marginación social, corrupción administrativa e inseguridad pública que prevalecen?
Es verdad que la popularidad política del presidente López Obrador, será una fuerte influencia en los triunfos que logre Morena en las 15 entidades que están en disputa en las elecciones del 2021.
Pero también serán factores de éxito remarcar que donde gobiernan el PRI, PAN o alguna fuerza política independiente poco ha cambiado el panorama de pobreza, corrupción y privilegios económicos que las elites políticas tradicionales siguen reproduciendo.
El cambio de régimen solo ha iniciado pero concretarlo tardara años en lograrse, si prevalece la actual tendencia morenista en México. Y no la vuelta a un pasado atroz, desigual, autoritario que recordamos cada 2 de octubre. Ni perdón, Ni Olvido.