Pedro García
Maestros y otros trabajadores de las Universidades Tecnológicas de Nuevo León se declararon en plantón permanente –día y noche- ante la reiterada renuencia del gobierno de El Bronco a remediar el desvío de recursos de los rectores por 500 millones de pesos y el hostigamiento laboral.
Si bien policías de Fuerza Civil pretendieron evitar la manifestación, los maestros hicieron entrar en razón a los uniformados que intentaron el uso de la fuerza para desalentar la protesta pacífica, informó la dirigente Karla Galicia en rueda de prensa.
Karla Galicia, Coordinadora General del Sindicato de Trabajadores de las Universidades Tecnológicas de Nuevo León decidió el “plantón” en una rueda de prensa ofrecida ante las puertas del Palacio Estatal, movimiento que apoyaron los diputados federales Guillermina Alvarado, Santiago González y José Luis García Duque.
También apoyan dirigentes de universidades tecnológicas de los estados del país que demandaron la constitución de un contrato colectivo con los trabajadores de Nuevo León y se reconozcan sus derechos sindicales, laborales y prestaciones sociales.
La diputada Guillermina Alvarado informó a los periodistas que las demandas de los maestros de las universidades tecnológicas las llevará a la Tribuna de la Cámara de Diputados toda vez que dichas instituciones académicas reciben recursos federales y merecen ser fiscalizadas.
Ello, además del dictamen que ya emitió la Auditoría Superior del Estado del Congreso Local señalando desvíos de más de 500 millones de pesos de las universidades ubicadas en Santa Catarina, Escobedo, Cadereyta y Linares.
Karla Galicia dijo que los rectores de las mencionadas universidades deben ser llamados a cuentas para que expliquen a dónde destinaron los recursos desviados ya que ninguno de ellos sustentaron las irregularidades administrativas.
Urge que el Congreso local tome cartas en el asunto y procure que los rectores sustenten los recursos faltantes o devuelvan a los maestros los dineros robados, si se comprueba que incurrieron en prácticas delincuenciales en el manejo de los presupuestos que reciben del gobierno estatal y de la Federación-.
También demandó el ajuste a la baja en el salario de los rectores que asciende a cerca de 100 mil pesos mensuales, muy distinto a las percepciones de los maestros de poco más de tres mil pesos quincenales.