Por Rogelio Romero/Corresponsal
Washington.- Tras reunirse con la parte de su gabinete encargada de la seguridad nacional así como de asuntos humanitarios y salud, el presidente Joe Biden encomendó a la vicepresidenta Kamala Harris, estar a cargo del equipo de respuesta de la Casa Blanca, para atender los problemas migratorios que se han presentado en la frontera sureste del país.
Tras recibir fuertes críticas por parte de legisladores y senadores republicanos respecto al manejo que ha dado su gobierno al creciente número de personas que están cruzando la frontera sin documentos, el presidente Biden confió en que el equipo de respuesta encabezado por Harris inicie a la brevedad posible una serie de respuestas que en el corto plazo, atiendan la problemática migratoria en la frontera.
La vicepresidenta tendrá como misión principal coordinar esfuerzos diplomáticos con los gobiernos de México, Guatemala, El Salvador y Honduras para enfrentar los problemas que causan la inmigración indocumentada de miles de personas hacia Estados Unidos, y buscar soluciones multilaterales a la actual situación.
Sera el primer rol importante que asuma Harris dentro del gobierno de Biden, y a lo que ella misma ha llamado un problema bastante grande en referencia a la problemática migratoria en la frontera sur del país.
MISION INTERNA
Entre las responsabilidades de Harris se encuentran coordinar esfuerzos con el Departamento de Seguridad Nacional para que se apliquen todos los protocolos migratorios existentes, esto en referencia a los inmigrantes que han peticionado asilo humanitario, el destino que tendrán los niños no acompañados que llegan al país, y que se apliquen las políticas de aceptación o deportación en los casos que procedan.
Harris también tendrá que estar al pendiente de los esfuerzos que realice el Departamento de Salud y Servicios Humanitarios que encabeza Xavier Becerra, esto en referencia al cuidado y atención que se brinde a familias asi como a niños migrantes que se encuentran en albergues o centros de procesamiento.
La última vez que la vicepresidenta Harris visitó la frontera del sur de Texas fue un día previo al cierre de la campaña presidencial 2020, durante un mitin político en la explanada de la Universidad de Texas en Edinburg.
Durante ese mitin Harris resaltó la importancia social que tienen las familias de inmigrantes en la vida del país, así como la fuerte herencia cultural y trascendencia histórica que las han fortalecido como parte de la comunidad estadounidense.