La capital del país es un área de alta sismicidad y el impacto de este fenómeno ha llegado a ser devastador. Sin embargo, hay algunas zonas de la CDMX con menor intensidad sísmica donde podrías vivir. En este sentido, el portal inmobiliario Propiedades.com compartió cuáles son y cuánto cuesta vivir en ellas.
Zonas de la CDMX con intensidad sísmica media
De acuerdo con el mapa compartido por Baruch, la zona centro y poniente de la CDMX muestra mayor intensidad sísmica. Entre ellas se encuentran las alcaldías Cuauhtémoc, Iztacalco, Venustiano Carranza, Xochimilco y Tláhuac.
Por otro lado, las alcaldías con zonas de intensidad sísmica leve a moderada son:
Si quieres vivir en estas alcaldías debes saber que de acuerdo con la sección Valores de Propiedades.com, hay casas en venta con un precio medio que va de los 2.1 millones de pesos a los 26.2 millones de pesos. Siendo Iztapalapa, Azcapotzalco y Gustavo A. Madero las más accesibles. Los departamentos alcanzan costos entre los 757,478 pesos a 7.8 millones de pesos.
Zonas de la CDMX con intensidad sísmica baja
Gracias al tipo de suelo donde se localizan, las zonas de la CDMX con intensidad sísmica baja son las alcaldías:
Cuajimalpa tiene las casas de mayor precio medio, pues alcanzan hasta los 14 millones de pesos. Le siguen las alcaldías Álvaro Obregón —8.9 millones de pesos— y Magdalena Contreras —6.8 millones de pesos—. Milpa Alta tiene viviendas más accesibles que pueden costar 2.2 millones de pesos.
En cuanto a los departamentos, los más económicos se encuentran en Milpa Alta con un precio medio de 458,074 pesos. En Magdalena Contreras y Álvaro Obregón este costo va de 4.1 a 4.6 millones de pesos. En Cuajimalpa este valor corresponde a 9.3 millones de pesos, aproximadamente.
Leonardo González, analista Real Estate de Propiedades.com, explica que la plusvalía y expectativas de las viviendas en zonas de alta intensidad sísmica se ven contenidas. Ya que en ellas existe un mayor riesgo habitacional.
“La población prefiere ubicarse en zonas de menor intensidad sísmica, provocando una alta demanda potencial por residir en ellas. Una vivienda en estas áreas considera dicha característica en un porcentaje correspondiente al 20 por ciento de su plusvalía”, indica.