Walter Elizondo 

Monterrey – Tras 16 meses de que desapareció Griselda Mayela Álvarez Rodríguez, su familia y amigos exigen a la autoridad aplique el Protocolo Alba para buscarla viva. 

Álvarez laboraba como Secretaria técnica de la maestría en Antropología social del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (Ciesas), cuando desapareció el 11 de agosto del 2020.

Maya Alejandra, hija de Mayela, dijo que no hay rendición, sino esperanza de encontrarla viva.

A su vez, Séverine Durin, investigadora del Ciesas, asegura que no se ha atendido adecuadamente el asunto por lo que piden la aplicación del Protocolo Alba, mecanismo para la búsqueda inmediata de mujeres y niñas desaparecidas. 

En este protocolo para proteger su vida e integridad deben coordinarse los tres niveles de gobierno, medios de comunicación, sociedad civil e iniciativa privada.

“Se han pedido copias de la carpeta de investigación, porque el expediente digital está incompleto, sin embargo nos han dicho que no tienen dinero para sacar copias, tuvimos que ir a entregar papel a la Fiscalía para que pudieran sacar copias del expediente”, agrega Durin.

El día de su desaparición, la mujer tuvo un último contacto con su hija a la que avisó que caminaba rumbo al trabajo en el Barrio Antiguo, un sector del centro de Monterrey. 

Presuntamente, la habrían visto después en el sector El Lago cercano a su domicilio en el municipio de San Nicolás. Después ya nada se ha sabido de ella. 

Familiares, amigos y compañeros de trabajo colocaron  una ofrenda floral para Griselda Mayela y con ella la fe y la esperanza de que pronto aparezca con vida. 

Asimismo, renovaron el árbol de la vida que se ubica en el exterior de las instalaciones del Ciesas, donde colocaron una fotografía de Álvarez Rodríguez.

“Mantenemos la esperanza de encontrar con vida a nuestra querida Mayela, a pesar de que no hubo avance significativo de parte de la Fiscalía. Nuevamente, ésta incumplió con realizar acciones de investigación, y aludió que no le fue posible porque tuvo que llevar a cabo cateos para otras investigaciones”, señala la investigadora Durin.