CLARA VILLARREAL

Un tiburón ha despertado. No es una regla general, pero algunos de los tiburones tintoreras suelen salir de cacería muy temprano por la mañana o al anochecer, esto les permite ocultarse ante sus presas y durante el día aprovechan para descansar. Nuestro recorrido a “Las Tintoreras” en la isla Isabela, en las Islas Galápagos fue a medio día. Ahí estábamos a mitad del segundo canal y sin yo poder ver aquella escena, solo pude decirle, – Dale, no pasa nada, no dudes y pásale por arriba. ¿A lo macho?, me preguntó, y le dije, ¡A lo macho! Tomó valor y siguió nadando. Pasó por encima del tiburón agitado y siguió el camino de aquel segundo canal. Ahora era mi turno. Me tomé de las mismas paredes con mis manos, una de cada lado del canal, hice presión y sumergí mi cara para ver la escena. En ese momento me di cuenta de que aquella frase: ¡A lo macho! ya no me iba a funcionar a mí. Entré en estado de shock; me paralicé, el tiburón seguía inquieto, la arena seguía revuelta y yo estaba completamente sola. No sabía lo que significaba lo que segundos antes yo misma le había dicho a mi pareja: -Dale!, no dudes. ¿Y ahora? quién me lo podía decir a mí, que no dudara y que a lo macho siguiera nadando. Fueron segundos de inmensa frustración y parálisis, quería escalar aquellas paredes volcánicas llenas de cangrejos enormes, pero algo me decía que continuara y que confiara en que todo iba a estar bien. No puedo describir el sentimiento que tuve en este momento de shock, me encomendé a Dios y seguí nadando con la vista arriba sin volver a meter la cara al agua y sin ver a aquel animal quien pudo haber cambiado por completo mi destino con tan solo el roce de un aleteo. ¿Por qué los humanos desafiamos a la naturaleza? Se sabe que el tiburón tintorera no es un animal gustoso por la carne humana, sin embargo, en ese momento cualquier estadística no tiene importancia, nosotros estábamos invadiendo un lugar que no nos corresponde. ¿Qué sucede cuando despertamos al vecino de nuestra casa con música a todo volumen? se molesta y reacciona. Ahora, ¿qué sucede cuando invades el descanso de un tiburón? Por suerte la contamos. Ecuador no estaba en nuestra lista de viajes por hacer, sin embargo, hoy termino este editorial después de 11 capítulos llenos de grandes recuerdos que nos darán mucho de que platicar por el resto de nuestras vidas. No hay viaje sin sorpresas, y Ecuador nos sorprendió. Si alguna vez decides hacer un viaje lleno de magia, no dudes en darte el lujo de conocer este hermoso país. Fin.

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