Luego de que el Tribunal Electoral del Estado revocara el nombramiento de Cecilia Robledo y solicitó al Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Nuevo León asignar la curul que dejó el panista Fernando Adame, el diputado local por Morena, Waldo Fernández y ex diputado Luis Armando Torres celebraron esta decisión y aseguraron que lucharán por el espacio.
De acuerdo a Luis Armando Torres la bancada está subrepresentada, por lo que la curul le pertenece al partido y en caso de que el Instituto les otorgue la razón, éste podría ocupar dicho lugar.

Por su parte, Fernández recalcó que existen tres supuestos por los que Torres debería de ser el diputado que reemplace a Adame: el primero, por el número de votos que recibió el partido en la última elección y que supera por mucho el ocho por ciento; el segundo, que determina que no puede haber ni sobrerrepresentación y subrepresentación en la conformación del Legislativo y; en tercer lugar, que el Congreso no tiene competencia para asignar a un diputado o diputada.
Ambos reprocharon la “compra-venta” de diputados en los últimos años.