Raúl Guajardo Cantú
Aunque se esperaba que el viernes pasado Marcelo Ebrard diera a conocer la decisión que ha tomado con relación a su futuro, ya varios analistas habían apuntado que el exsecretario de Relaciones Exteriores se encontraba fuera del país y que sería hasta este próximo viernes 10 cuando diera a conocer su postura.
La realidad es que el tiempo pasa y las opciones de Ebrard se van reduciendo, ya que, por ejemplo, la de ser un candidato independiente la dejó pasar inmediatamente después de terminado el proceso interno de Morena, en tanto que las posibilidades de quedarse dentro de este organismo político se ven cada vez más lejanas debido tanto a declaraciones propias como a las realizadas por algunos de sus cercanos colaboradores.
Aunque hasta hoy, fuera de sus declaraciones acerca del proceso, ni Marcelo, ni sus seguidores han hecho nada que pueda ser interpretado como una traición a Morena o al presidente, hay quien piensa que ya las declaraciones acerca del proceso interno en que resultó electa Claudia Sheinbaum como coordinadora de los comités de defensa de la 4T lo inhabilitan para continuar en esta.
Sin embargo, no se han materializado hasta hoy en acciones como, por poner un ejemplo que sería muy palpable y ese sí crítico, en votos de sus partidarios en contra del presupuesto, ni siquiera han propuesto algunos cambios, no digamos ya significativos, sino siquiera mínimos.
Así que por ahora las puertas quizá no estén cerradas para Ebrard en Morena, pero tampoco es que lo esperen con los brazos abiertos. Al menos no tanto como para que le cumplan lo de ser coordinador de los senadores de ese partido.
Un escenario que se ha especulado como el más probable, consiste en que sea el abanderado de Movimiento Ciudadano, algo que no sería mal visto por el presidente, quien considera que dividir la oposición es algo positivo para Sheinbaum.
En MC, sin embargo, existe una corriente que no quiere ceder ante la posibilidad de que Marcelo vaya como su candidato, encabezada esta corriente por el gobernador de Nuevo León, Samuel García, quien quizá debido a que desea atajar tal posibilidad se ha lanzado abiertamente al ruedo presidencial cuando hasta hace unos días consideraba que aún no era el tiempo de hacerlo.
Ante esta postura, Dante Delgado, líder de los naranja, ha manifestado que tanto Samuel como Marcelo se encuentran en posibilidades de ser los abanderados presidenciales de ese partido, aunque, a decir verdad, faltaría ver si las condiciones que al parecer ha impuesto el excanciller pueden ser cumplidas en su totalidad, o la mayoría de ellas, por MC y si esto no genera cierto resquemor al interior de ese partido, ya que algunos de los miembros importantes de este serían desplazados en beneficio de la “gente de Ebrard”.
Una posibilidad que a últimas fechas se ha presentado consiste en señalar que Marcelo coordine la campaña de Xóchitl, con miras a sustituirla en caso de ser necesario, lo cual francamente se ve muy difícil, ya que la imagen de que la campaña de la senadora Gálvez no ha despegado parece más bien una estrategia de Morena que otra cosa.
Al fin de cuentas las cosas no se ven tan claras para Marcelo, pero esperemos a ver si el viernes próximo no vuelve a gritar ¡qué viene el lobo! Y este no llega, lo que le restaría otra parte de su capital político.
Es tiempo de definiciones.