El nearshoring es un regalo para el país, es como si Santa Claus hubiera tocado a la puerta, pero para aprovechar esa oportunidad se requiere de la unión de empresarios y gobierno para atender los retos que representa la relocalización de empresas, principalmente en materia de infraestructura, explica Ari Cassab Petit, Presidente de la Asociación de Empresarios Mexicanos (AEM) Capítulo Ciudad de México.
En este sentido, una de las prioridades para sacar ventaja del nearshoring es la inversión a corto y mediano plazo en materia de infraestructura. “Hoy en día México está recibiendo una inversión de entre 35 y 37 mil millones de dólares, ¿qué tanto podemos crecer? Depende de la infraestructura con la que contemos y la que podamos construir a corto y mediano plazo para atender las necesidades de estas compañías que están llegando a territorio mexicano”, añade el también CEO en SAMEJ GROUP.
Uno de los principales sectores donde el país requiere inversión es en materia de vías de comunicación, como carreteras y vías ferroviarias.
La importancia de la infraestructura física radica no sólo en temas de optimización para las empresas, sino que también facilitará la conexión entre las zonas norte y sur del país, para que el impacto positivo del nearshoring no se quede solo en los estados fronterizos.
La consolidación de proyectos como el corredor interoceánico, que contempla la construcción de una serie de infraestructuras, incluyendo carreteras, ferrocarriles, y posiblemente instalaciones portuarias y ductos para transporte de hidrocarburos, facilitaría el movimiento de carga desde los puertos del Golfo de México, como el de Coatzacoalcos, Veracruz, hacia los del Océano Pacífico, como Salina Cruz, Oaxaca.
Para ari Cassab Petit otro elemento de infraestructura que el país debe priorizar es el sector energético, a fin de que todas las entidades se encuentren en posibilidades de atender las necesidades que surjan a partir de la relocalización de empresas, así como la disposición y aprovechamiento de recursos naturales como el agua.
Asimismo, hay tres puntos en los que el país debe empezar a trabajar para el nearshoring: Unidad nacional, inversión en infraestructura y certeza para las empresas.
