Raúl Guajardo Cantú
Hemos comentado en nuestros más recientes textos, la importancia que tiene para el gobernador del estado, Samuel García, ganar la mayoría en el Congreso Local, tanto en la elección de este año, como en la de 2027, por aquello de tener cubiertas sus espaldas, algo que le interesa en demasía como lo demostró en su fallida aventura en pos de la presidencia de la república.
También dijimos que municipios como Monterrey, por la candidata que irá por la presidencia municipal en la capital del estado, su esposa Mariana Rodríguez, y Santa Catarina debido a que ahí se ubicará la empresa que será el buque insignia de su gobierno y de su proyección a futuro: Tesla.
Será en pos de esos objetivos que Samuel enfocará todas sus baterías, incluso aquellas que no debería para no contravenir las leyes electorales, sin embargo, consideramos que habrá situaciones fuera de su control que pudieran jugar en su contra.
La más obvia es el abasto de agua en toda el área metropolitana, ya que ahí se ubica aproximadamente el 85% de los votantes potenciales, que en caso de que se haga realidad el pronóstico que señala que este año las lluvias no serán ni siquiera las que se promedia en la entidad, pudieran degenerar en una crisis en pleno proceso electoral, que seguramente llevaría a los ciudadanos a votar con enojo, responsabilizando a Samuel de la probable crisis.
Lo anterior independientemente de las explicaciones que pudiera ofrecer, ya que, con el triunfalismo que le caracteriza, él ya declaró la crisis terminada, aunque no deja de emitir los anuncios en los cuales conmina a los nuevoleoneses a cuidar el agua.
Pero hay otra crisis que le puede estallar y no precisamente por inacción o por falta de visión de futuro, sino precisamente por estar enfocado a solucionar un problema que aqueja al área metropolitana: la movilidad.
Samuel inició obras de las líneas de Metro que ha prometido desde su campaña en pos de la gubernatura, lo cual es aplaudible, sin embargo, durante el periodo de construcción lo más probable es que se generen problemas más graves de movilidad, como hoy ocurre, por ejemplo, en los alrededores de la Y griega, en donde a la ya de por sí emproblemada vialidad hoy se agregan los trabajos de una nueva línea del Metro.
En pleno verano, sin agua, o al menos con poco líquido, con vialidades congestionadas y con las campañas en su apogeo, Samuel puede sufrir un voto de castigo debido a cualquier imponderable que se presente, tanto por lo que respecta al agua, como por el retraso en las obras, lo cual lo llevaría a una dolorosa derrota y a un futuro incierto.