A ti que has ido a trabajar con el corazón roto, que pones una sonrisa a pesar de que estas herido, que elevas la cara mientras te levantas del suelo te digo lo que Dios me dijo una mañana que me sobaba los golpes de la vida: Eso que te duele es algo de ti que aún está vivo y tiene que morir. Pff!

Entonces lo entendí: Dios estaba usando esas circunstancias no para cambiar ni darle lecciones a otros, ¡eran por mí! ¡porque Él sabe que hay mucho trabajo que hacer aquí dentro en mi ser que necesita ser transformado.

Como está escrito: Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; somos contados como ovejas de matadero. Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. 

No es lo que te pasa, ni las personas, las que te hacen daño, es lo que tú esperas de ellas, lo que te estorba y te impide amarlas como Dios las ama.

Hoy me alegró mucho saber que Dios me estaba diciendo que sí, que esos sentimientos, tenían que morir para que yo pudiera vivir y ser mas que vencedora 

Definitivamente ha sido un año en el que Dios ha traído mucha libertad a mi alma, y apenas estamos en los primeros 6 meses!

Mi Dios es mi Libertador!

¿Cree esto? Hable con Dios, lea la Biblia y descúbralo.  Solo la Verdad nos hará verdaderamente libres.

Romanos 8:36-37

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