Gerson Gómez Salas
Ya trapeo con su nombre la presidente Sheinbaum. En una de sus primeras mañaneras. La conferencia de prensa sirvió para esclarecer puntos finos de la mal llamada lucha por el poder judicial.
La ministra Piña reconoció nepotismo hasta del 50% en los trabajadores. Amistad sin demostrarse en la nomina es demagogia. Nuestros decentes laborales cruzan recomendaciones para la esposa, el hijo, la sobrina, el suegro en distintos espacios.
Sheinbaum acusó moral y ética sobre la ministra presidente. Su figura, de por sí, significativamente pequeña, no cuenta ya con periodo de prueba o tolerancia. Bañada en basura directamente desde los dichos. Practicas tan deleznables en un país sin sincronía.
Escuchar las participaciones políticas de Marko, Alejandro o Ricardo Anaya no les posiciona como oposición. Cualquier movilización con su participación levanta sospechosísimo.
Desde donde ha salido el recurso financiero para traer desde los estados al personal y simpatizantes. La coperacha oscura. En el Senado, la hilaridad desde el presidente del espacio.
Con 85 estamos sobrados. Ya los tenemos. Ese voto fantasma. Para las decimas vendrá de un senador saltarín. De Movimiento Ciudadano. Del extinto PRD. Acuerdos van. Acuerdos vienen.
Así quemaron a Marko y Alejandro con sus entuertos en la elección del Estado de Coahuila. Como usted mande señor presidente. Estamos para servir a la patria. México, Mexico, rra, rra, rra.
Hoy queda. Desde Palacio Nacional, la Paz Porfiriana de Don Andrés Manuel les dice a sus colaboradores mas cercanos. Se los dije. Se los dije. Vamos a blanquear a los fantasmas grises. Ni las manos pudieron meter.
Bien por Claudia. Pobre de la ministra Piña. Ahora si se va a poner de pie para saludar en el cambio de poderes al presidente Sheinbaum. Ya muy tarde. Tan bonito lo bonito.
Lastima no olvidaron su pecado.