Si bien, aplaudió la reducción de la jornada laboral al señalar, que de concretarse el trabajador disfrutará más tiempo de esparcimiento familiar, el sindicalista Celso Lugo Sánchez propuso al gobierno federal exentar de impuestos el pago de las primeras ocho horas extras laboradas durante la semana, para evitar dañar la economía de las familias de la clase obrera.

  Lo anterior al considerar que con la entrada en vigor de la llamada “Jornada Laboral de 40 Horas” los empresarios van a necesitar contratar más tiempo para que sus empleados completen los procesos de producción o de prestación de servicios en sus centros de trabajo.

  “Las 40 horas que  están por implementarse, eso beneficia a la clase trabajadora. Eso nos lleva a acortar tiempos  de ausentismo del trabajador para la familia . Entonces esa propuesta del gobierno la aplaudimos todos los trabajadores, estamos muy contentos, pues realmente se va hacer un esfuerzo conjunto entre el  gobierno, los empresarios y los trabajadores para que la armonía familiar crezca”, expresó Lugo Sánchez.

  Sin embargo, consideró que uno de los aspectos que no se han contemplado en la disminución de la jornada de trabajo, es el  manejo fiscal en el pago de las horas extras.

  “Aquí tenemos una situación que no se ha puesto en las mesas de trabajo, todos los trabajadores por necesidad de la operación han tenido que trabajar tiempos extras para sacar adelante la producción en todas las empresas del Estado y de la República Mexicana. Cuál es la situación que nosotros vemos como representantes de los trabajadores?, es que en cuanto a la cuestión fiscal no beneficia a la clase trabajadora”.

   “¿Por qué?, porque si ahorita por necesidad de la operación, la empresa nos pide que nos quedemos tiempo extra y ese tiempo extra nos grava impuestos y por ese impuestos a fin de año nos hacen un ajuste y nos cobran otra vez un impuesto sobre el ajuste, eso afecta la economía de los trabajadores ” , explicó el dirigente sindical.

  Entrevistado en exclusiva para Diario Digital, en su oficina del centro de Monterrey, Celso Lugo sugirió que para equilibrar el impacto económico de la medida fiscal, las autoridades hacendarias , graven el 10 por ciento de impuestos al cobro de la novena hora extra trabajada a la semana.

  “La propuesta es muy sencilla -detalló- que  las primeras ocho horas extras dobles por semana sean exentas de impuestos y a partir de la novena hora que se paga al triple, ahí si se cobre un impuesto del diez por ciento “, estimó.

  El dirigente sindical pidió que en las mesas de análisis  sobre la Jornada de 40 horas anunciadas por la presidenta de México, Claudia Sheimbaun Pardo a nivel nacional y en las del Estado que propuso el gobernador de Nuevo León Samuel García Sepúlveda se incluya como prioritario el tema fiscal en relación al pago de las horas extras que habrá de cumplir el trabajador.