Hay un instinto tan perfecto que le permite a un agresor identificar casi con precisión láser al vulnerable y a quien no tiene quien lo defienda, por eso los migrantes, las viudas y los huérfanos son tan preciosos para Dios.

Pero otro grupo muy vulnerable de ser atacado son los niños, y para llegar a los niños, hay que quitar del camino a sus padres.

A ti papá que te hicieron creer que para ser un buen proveedor debías estar encerrado en una oficina más de 8 horas y otras más en el tráfico para llegar a casa física y mentalmente agotado .

A ti mamá, que te vendieron la idea de que ser ama de casa es el empleo peor pagado y que para sentirte plena tenías que superarte estudiando, trabajando, gastándote el dinero en mantenerte joven y proyectando una idea de éxito en las redes, pero en realidad querían que pagaras impuestos porque al ser la mitad de la población no lo hacías.

A ti que te abrumaron pensando que debías ser feliz, aunque fuera rompiendo tu familia, y ahora te tienen dejando a tus hijos a merced de otros para cuidar hijos que no son tuyos.

A ti y a mí, nos engañaron para que estuviéramos tan ocupados, que dejaramos solos a los niños y nos los educara la televisión y las redes sociales y ya no quisieran saber nada de los viejos ni de tener hijos.

Mi pueblo perece por falta de conocimiento, dice el Señor, en Oseas 4:6

Los hijos están solos, y no necesitan vacaciones en la playa una vez al año, necesitan a papá y mamá juntos y al pendiente de ellos.

Ser un buen proveedor no es llenarlos de bienes sus bolsillos sino sus corazones.

Ser una mujer plena no es salir de casa, es hacer de ella tu mayor logro.

Porque yo sé papá, mamá, que en el fondo te sientes culpable, porque en tu corazón está escrita tu verdadera identidad y propósito y hace mucho que no te encuentras a ti mismo cuando te miras al espejo.

Pero si hoy te diste cuenta que cometiste errores y quieres cambiar, solo tienes que darle a Jesús el control de tu vida y dejarlo que te guíe en cada decisión. No necesitas palabras especiales, a veces una lágrima las dice todas, pero si te atreves a decir algo a tu favor y de tu familia, quiero que sepas que serás salvo si reconoces abiertamente que Jesús es el Señor y si crees de todo corazón que Dios lo levantó de la muerte. Pues Dios te aprobará si crees de todo corazón, y te salvará si con tu boca lo confiesas abiertamente. (Romanos 10:9-10)

Ahora busca una iglesia donde te enseñen a conocerlo pero también a obedecerlo, no conforme a las emociones y rituales de costumbre, sino conforme a lo que Él dice en la Biblia y verás que te cambia la vida.

¿Cree esto? Hable con Dios, lea la Biblia y descúbralo.  Solo la Verdad nos hará verdaderamente libres.Email mujervirtuosa@instruccionespersonales.com
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