Raúl Guajardo Cantú
Todos los analistas, como es natural, piensan en términos de UNA elección a llevarse a cabo en 2024, con una dinámica general. Domina en el análisis la sensación de que la elección presidencial lo es todo y genera la única dinámica digna de análisis, cuando la verdad, nos parece, es muy distinta.
Cada estado de la República tiene sus propias prioridades, sus grupos, intereses y los arreglos que hacen los políticos en dichas regiones.
Quizá los ejemplos más claros son los casos de CDMX, Jalisco y Nuevo León, en los cuales las dinámicas locales dominan por encima de las nacionales, sin embargo, no son los únicos.
Quisimos traer a colación el hecho de las dinámicas que generarán las elecciones locales, porque estas pueden ser un factor que impacte en las elecciones presidenciales, sobre todo por aquellos que no votan en bloque, sino que lo hacen diferenciadamente.
Por ejemplo, se habla de que en el caso de la CDMX el candidato sería Omar García Harfuch porque Claudia Sheinbaum se habría decantado por él, sin embargo, en esa entidad los grupos radicales de Morena no lo ven bien, preferirían a una candidata del corte de Clara Brugada y quizá el voto podría acabar por dividirse, como aproximadamente sucedió en 2021, cuando Morena perdió 9 alcaldías precisamente porque sucedió un fenómeno similar.
En Jalisco, las tensiones entre el líder nacional de Movimiento Ciudadano, Dante Delgado y el gobernador Enrique Alfaro están perfilando un posible cisma al interior de ese partido, precisamente porque mientras a nivel nacional se tiene el propósito de ir solos por la candidatura presidencial, para Alfaro es importante ir en coalición con PRI y PAN en las elecciones locales.
Qué decir de las prioridades de Samuel García, que busca ganar el Congreso local a como dé lugar, incluso para él sería mejor ganarlo desde ya gracias a las renuncias de diputados locales a sus partidos o curules buscando que se pasen a MC.
El tiempo es importante para Samuel debido a que quiere ser candidato presidencial por su partido, pero en las actuales condiciones sería muy difícil para él lograr su objetivo, correría además el riesgo de que el Congreso local nombrara a un sustituto que no fuera de su partido.
Así como estos tres ejemplos, hay más en los distintos estados de nuestro país, son situaciones locales que pueden influir en el ámbito de la elección federal.
Así que hay que estar atentos a esas dinámicas, no sea que se presenten sorpresas.