*Arzobispo de Monterrey advierte que sería peligroso armar a la población
David Casas
Monterrey, N. L- La legítima defensa en los negocios es peligroso e implica una ciudadanía armada, por lo que debe darse reversa, recomendó el arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera quien afirma que la iglesia católica no cree en el autogobierno.
Por ello, el presidente del Episcopado Mexicano solicitó al Congreso de Nuevo León que se de reversa a la legítima defensa a negocios, pues será muy peligroso para la población que haya armas.
Sin embargo, cree que la legítima defensa podría aplicarse solamente en casos muy extremos y no hacer normal el que se tenga armas solamente porque sí.
“Creo que tiene que ser en casos muy extremos para que estos sea así, simplemente es para el que se defiende no quede imputado de delito, tiene que medirse porque es entrar en una situación en la que ya nadie va a resolver”, dijo al terminar los servicios religiosos dominicales los que presidió en la Catedral Regiomontana.
Para el prelado, es una tendencia sobre todo en Estados Unidos, pero, agregó, implica una ciudadanía armada, y peligrosa para todos. “No es sano que los ciudadanos se armen para que puedan defenderse, sino vuelve a cometerse un delito mayor”.
Señala Cabrera López que la iglesia católica no cree en el autogobierno ni en una decisión personal para combatir el crimen, pese a que algunas personas quieran hacer justicia por ellas mismas.
“Sé que cuando estás molesto no puedes esperar pero siempre tenemos todos que hacer el mayor esfuerzo interior para darle a la autoridad de que ejerza su tarea”.
El Congreso de Nuevo León aprobó en comisiones extender la legítima defensa a los negocios, pues desde 2017 se aprobó ese recurso en lo que respecta a viviendas.