El gran prospecto del boxeo mexicano y Latinoamericano Iván “Sonrics” Ramírez murió este jueves en Mérida, capital del suroriental estado de Yucatán, donde presuntamente se suicidó.

Ramírez, quien cumplió 24 años el 17 de mayo pasado, fue hallado colgado en su casa. Unos familiares lo encontraron y dieron parte a las autoridades de Justicia, que intervinieron el predio en una colonia popular del sur de Mérida, para hacer las investigaciones.

El púgil el miércoles había departido con varios conocidos suyos que no detectaron anomalía alguna en su ánimo y sabían que iba a iniciar la parte fuerte de su entrenamiento pasa una próxima pelea en Surinam.

El “Sonrics”, quien tenía un palmarés de 14 triunfos, con seis nocauts, y una derrota, fue dueño de un boxeo ofensivo, alegre, que le había generado ya muchas simpatías y admiración en la afición del sureste mexicano.

Pocos meses atrás el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) lo clasificó y era de esperarse que avanzara en ese escalafón con miras a una pelea por el campeonato universal del peso mosca ligero.

Su último combate fue el 15 de marzo pasado en el Gimnasio Polifuncional de Mérida, donde dio una exhibición de poder y talento boxístico y derrotó por amplia decisión al internacional yucateco Ulises ‘Condorito’ Martín en su estreno en peleas de 10 asaltos.

Apenas en diciembre pasado Ramírez tuvo su primer combate internacional en Surinam, donde venció por decisión unánime en seis asaltos al venezolano Nohel Arambulet.

Enterado de su deceso, su promotor y apoderado, Andrew Pérez, dijo a Efe que este día perdió no a un boxeador, sino a un amigo.

“En estos momentos no tengo cabeza más que para pensar en la persona, en ese muchacho y en su familia, en el pesar y en el trago amargo que ellos pasan, así como nosotros”, afirmó.

“Sonrics” Ramírez, quien en los próximos meses estaba programado para iniciar una campaña en cuadriláteros asiáticos, será velado esta tarde en su domicilio.