Vence 1-0 a Rayados, en el global quedaron 1-1 pero pasan los felinos por mejor posición en la tabla.
Por Rafael Martínez, del periódico ABC
San Nicolás.- La ventaja de 1-0 que sacó Monterrey en el juego de ida, no fue suficiente y son los Tigres quienes ya se encuentran instalados en la final del fútbol mexicano, al aplicarle la dosis al Monterrey, derrotándolos 1-0 y pasando por mejor posición en la tabla.
Los felinos hicieron lo necesario para sacar el resultado que necesitaban y aunque no desplegaron un fútbol vistoso, defensivamente pusieron cerrojo a su portería y los últimos minutos se dedicaron a despejar todo peligro renunciando al ataque.
Fueron 45 minutos iniciales en los que Monterrey se dedicó a cuidar la ventaja, teniendo solamente una clara de gol en los botines de Dorlan Pabón, con un disparo de media distancia que pegó en el poste derecho de Nahuel.
Justo inmediatamente después del postazo, Tigres logró el tanto que lo ponía en la final. Al minuto 42 un centro bombeado por izquierda de Eduardo Vargas a segundo poste donde llegó Guido Pizarro para conectar de cabeza.
El gol le salió caro a Pizarro, pues en el remate chocó de cabeza fuertemente con Gallardo, y aunque regresó para terminar el primer tiempo ya no saltó a la cancha en la parte complementaria.
El segundo tiempo Monterrey salió a presionar y atacar, pero se encontró con una barrera llamada Nahuel Guzmán, atajando disparos de Funes Mori, Avilés, Layún, Stefan y Pizarro, estos dos últimos de gran peligro.
Monterrey también hizo un cambio obligado tras la lesión de Marcelo Barovero, ingresando Luis Cárdenas, quien prácticamente no tocó la pelota, y su única intervención fue para salvar a su equipo del segundo gol, tras un pase equivocado de Maxi Meza que dejó a Vargas en mano a mano con el guardameta albiazul que desvió por encima de la portería.
Monterrey le apostó a tirarse al ataque por la necesidad del gol y en el riesgo recibió un par de contragolpes que no terminaron en gol por la mala decisión de los jugadores felinos al errar el pase, ahogarse en la jugada o sacar un mal disparo.
El minuto 90 más los siete de compensación se cumplieron y con el silbatazo final los 41 mil 615 aficionados celebraron el pase a la final, a la espera del rival.
Con esta, Tigres llega a su séptima final bajo la tercera etapa de Ricardo Ferretti al frente.