Las autoridades estadunidenses de inmigración sopesan la posibilidad de arrestar y deportar a familias completas de inmigrantes sin documentos, en particular a aquellas que hayan agotados sus recursos legales.
El designado jefe del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), Mark Morgan, asentó que a su juicio no se puede exentar a nadie que tenga una orden de deportación, lo que incluye a familias completas.
Se trata de quitar incentivos a familias de migrantes para que viajen a Estados Unidos, dijo en conferencia de prensa Morgan, designado el pasado 5 de mayo por el presidente estadunidense Donald Trump para encabezar esta agencia gubernamental.
El funcionario fue jefe de la Patrulla Fronteriza en el tramo final de la administración del presidente Barack Obama, y ha apoyado la política del actual jefe de la Casa Blanca por construir un muro fronterizo.
A la fecha ocurre que las familias de inmigrantes sin documentos detenidas por las autoridades estadunidenses, son puestas en libertad ante la existencia de un tiempo límite para mantener en custodia a menores de edad.
En la zona suroeste de la frontera estadunidense con México, las llamadas “unidades familiares” encabezan el número de detenciones al menos desde el pasado octubre y hasta el anterior abril, según los más recientes datos estadísticos oficiales.
De acuerdo con el Departamento de Seguridad Interior, en octubre de 2018 las famlias detenidas sumaron 23 mil 116, los adultos en las mismas condiciones sumaron 22 mil 924 y los niños sin compañía cuatro mil 968.
En abril pasado, las detenciones individuales llegaron a 31 mil 606 (37.86 por ciento más) y los niños sin acompañantes aumentaron 79 por ciento para sumar tres mil 929.
Pero el de unidades familiares creció en 35 mil 358 y totalizó 58 mil 474, un crecimiento de 152.95 por ciento, apuntaron los datos oficiales.
En total el número de detenciones en las tres categorías citadas en los siete meses de octubre a abril pasados se ubicó por debajo de las 100 mil (98 mil 977), aunque el presidente Trump ha señalado que millones y millones de migrantes sin documentos cruzan cada año a Estados Unidos.
En sus declaraciones a la prensa este martes, Morgan dijo que el Congreso estadunidense ha fallado en modificar las leyes para desalentar la llegada de migrantes y pidió el cambio de las normas en vigor para hacer más rápidas las deportaciones.
Precisó sobre ese crecimiento que el ICE aún no llega a encontrarse en un punto de desbordamiento, pero sí a la mitad de alcanzar esa situación. Llamó también a México a incrementar sus propios esfuerzos de detención de migrantes y de miembros de organizaciones criminales.
De acuerdo con sus datos, México tiene en la región fronteriza unas 150 millas (alrededor de 241 kilómetros) donde puede poner puntos de revisión y un par de carreteras principales que serian fácilmente controlables para interceptar y detener los flujos de migrantes sin documentos y de narcóticos.
El director del ICE insistió en la petición para que el Congreso apruebe cuatro mil 500 millones de dólares en fondos de emergencia para las acciones fronterizas, que siguen sin aprobarse.
Las declaraciones de Morgan ocurren mientras una delegación mexicana encabezada por el canciller Marcelo Ebrard realiza gestiones con funcionarios y legisladores estadunidenses para evitar que el 10 de junio se impongan aranceles de 5.0 por ciento a todos los productos que México exporta a Estados Unidos, en busca de que evite cruces migratorios y de drogas.