Por Salvador Hernández LANDEROS
Durante 100 días, Felipe de Jesús Gallo, se fue vilipendiado del Estado y tirado a la lona.
Pero desde hace tres días fue designado titular provisional de la Agencia de Investigación Criminal de la Fiscalía General de la República.
El 25 de febrero, el Alcalde de San Pedro, Miguel Treviño, informó a El Norte, que “Ya era inviable Gallo”, encabezado de primera plana de edición dominical.
El alcalde informó que: “el liderazgo de Gallo se volvió inviable, que no era el que se necesitaba en ese momento, aunque tenía todo para ocupar el cargo”. El mismo día, el responsable de la columna Fricase, con el seudónimo de “El Abogado del Pueblo”, escribió el editorial titulado “Ganso vs Gallo” que decía.
“Desde la transición, era obvio que el equipo del presidente (del ganso mayor que no se cansa) no quería a Felipe Gallo en ningún puesto de mando policiaco”
“El Secretario de Seguridad del presidente, Alfonso Durazo, decía desde la transición que “no escuchaba cosas buenas” de Gallo. Por su parte, los militares decían exactamente lo mismo”.
“Es más, a su servidor le da la impresión de que la imagen negativa de Gallo que albergaba el hoy Secretario de Seguridad del equipo de los gansos, Alfonso Durazo, provenía de los mandos militares, concretamente del General Luis
Cervantes, hoy titular de la SEDENA pero antes jefe de la IV Región Militar, que incluye Nuevo León”.
Pero aparte de lo anterior, la salida de Gallo, regocijó a los titulares de Seguridad en el Estado y los municipios del Área Metropolitana.
Llámense Fasci Zuazua, Palacios Pámanes, Doria Mata, Garza Morales, Lara Cruz, Escamilla Vargas, Sánchez Quirós, Meza Gómez y Zavala, etc, etc.
Por el bien del Estado, ojalá que Felipe de Jesús Gallo, con el poder que le da su nueva función, no convierta sus acciones en la “Venganza de Moctezuma”.
Gallo laboraba en el CISEN cuando Jorge Tello Peón lo trajo a NL para formar Fuerza Civil financiada por la IP, concretamente por Lorenzo Zambrano.
Al llegar Jaime Rodríguez, separó del cargo a Gallo y, sus elementos de confianza fueron relegados, pero siguen en Seguridad del Estado y municipios.
En estos momentos, lo que le sobran a Gallo son expedientes sobre el qué y el cómo se manejan las policías en el Estado. Sabe bien el quién con quien.
Apelamos a la experiencia de Gallo para que con su gente conforme un buen grupo de inteligencia y trabaje por la seguridad en el Estado.
Pero eso sí, nada de revanchismos.
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