Las corporaciones de policía de los municipios de San Nicolás de los Garza y de Santiago, respectivamente fueron nuevamente señaladas por violación a los derechos humanos.
De acuerdo a la Comisión Estatal de Derechos Humanos sus elementos violentaron los derechos de personas por lo que emitió dos recomendaciones.
Una de ellas dirigida al alcalde de San Nicolás, Zeferino Salgado, ya que elementos de Polisan dispararon y acosaron a dos hombres durante una detención.
Los hechos ocurrieron el 8 de diciembre del 2018, en la Colonia La Fe, cuando uno de los hombres se encontraba haciendo sus necesidades fisiológicas en la calle y fue detenido y esposado.
Otro hombre preguntó el porqué de la detención y el elemento le disparó dos veces en la mano derecha y otras dos en la cabeza.
También disparó al detenido en la cabeza y le provocó pérdida de la vista. Luego el policía siguió a la víctima a su casa y le disparó al domicilio.
“En consecuencia, al caminar a su casa por los documentos necesarios para el traslado al hospital, se percataron que el policía había regresado para disparar al domicilio y de nuevo retirarse”, dice el informe de la CEDH.
La otra recomendación al municipio de Santiago es por agresiones a dos hombres y dos menores, el primer caso el 10 de agosto del 2017, cuando un hombre que ingería bebidas alcohólicas en la vía pública fue detenido por policías.
Los elementos agredieron al hombre con empujones, golpes y choques eléctricos, antes y durante la detención del hombre.
“En ese momento un policía le dio un golpe a la altura de la nariz, por lo que cayó al suelo boca abajo, inmediatamente le colocaron los ganchos metálicos mientras continuaban los golpes y patadas en todo el cuerpo”, relata la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
El segundo caso fue el 10 de mayo del 2018, cuando un adulto y dos menores de edad, de el poblado El Cercado, fueron agredidos por al menos dos policías y recibieron golpes y descargas eléctricas con un inmovilizador, hecho que está documentado en una videograbación.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos solicitó a ambos municipios implementar protocolos de uso de fuerza, capacitar a sus
empleados en uso de armas letales, garantizar una higiene y salud mental adecuada de los oficiales y hacer revisiones a los procedimientos de selección.
La gran parte de las recomendaciones que se han hecho en Nuevo León son a corporaciones de la policía estatal y municipal.