*Osvaldo Serna, líder del transporte de la CROC de Nuevo León dice que la politización del tema, detuvo el alza desde hace más de cuatro años; este viernes se autorizará un aumento

*Asumamos todos los sectores involucrados los riesgos que trae un incremento tarifario, dice

Monterrey, N. L.- Despolitizar el problema del transporte urbano y autorizar un incremento general de dos pesos más un subsidio gubernamental a las tarifas del transporte urbano propuso la CROC, a través de la Federación Estatal de Sindicatos de Trabajadores del Autotransporte.

De acuerdo a Osvaldo Serna Servín, secretario general de la FESTA, todos los sectores, incluido principalmente el gobierno del Estado, deben asumir la responsabilidad y los riesgos que conlleva el autorizar un alza de tarifas que desde hace más de cuatro años se ha detenido por temor a manchar la imagen gubernamental.

“Autorizar un alza de tarifas trae consigo un riesgo para el gobernador, para empresarios y organizaciones sindicales como la CROC que presta el servicio, alcaldes y diputados. Todos debemos asumir el riesgo, pues desde hace más de cuatro años el Estado ha detenido el incremento y seguramente se debe a que no quiere impactar su imagen”, explica.

Serna se pronuncia que el alza tarifaria sea de dos pesos y que se encuentre un equilibrio pues no puede afectarse más el bolsillo de los usuarios, pero, por otro lado, los empresarios y permisionarios tampoco deben quedar desprotegidos ante los altos costos de operación de las rutas camioneras.

El dirigente del transporte de la CROC propone que el impuesto que se cobraría a quienes prestan el servicio por medio de aplicaciones digitales deberá destinarse al subsidio camionero. Pero con ese gravamen o sin él, se debe buscar un esquema que permita subsidiar el servicio de transporte colectivo, añade.

Este viernes el Consejo del Transporte se reúne para fijar las tarifas camioneras que entrarían en vigor y que serían de poco más de 14 pesos para quienes pagan con una tarjeta de prepago y de quince pesos para los que lo hacen en efectivo. La tarifa actual es de doce pesos.

Según empresarios, a principios del 2020 dejarían de prestar servicio unas 700 unidades que llegan a su vencimiento al cumplir diez años de servicio por lo que hay que renovarse.

El costo de un camión es de dos millones 800 mil pesos y de entrada solicitan un enganche de hasta 400 mil pesos, dice Osvaldo Serna, quien apela a la Ley de Movilidad que tiene que aprobarse en Nuevo León y a la baja del diésel como lo ha prometido el gobierno Federal.