Política y Gente

Por Pedro García

El PRI mantiene su miedo a la democracia, es decir a la contienda interna, y sus dirigentes optaron por el albazo cerrando la competencia a una planilla única hacia la dirigencia y constriñendo los tiempos para no dar margen a que hubiera liza.

Ese es el nuevo PRI que vino a ofrecer Alejandro “Alito” Moreno a Nuevo León, es decir, la mejor oferta para una sociedad que ha estado rompiendo moldes, rechazando la hipocresía política de los partidos. Ese es el PRI qué extrañan los mexicanos, según dice Alito en su inveterada retórica.

Pues no, es el mismo partido dirigido verticalmente y que, de acuerdo a militantes de base, los procesos internos son movidos por los hilos del dinero para acomodar todo al gusto de una élite favorecida de lo que queda del “Sistema”.

“Inminente desbandada en los sectores del PRI de NL; la dirigencia estatal les reduce el número de consejeros y abre frente de guerra,” dice el titular del portal DiarioDigitalmx que dirige el periodista David Casas al levantar el sentimiento de voceros de agrupaciones que integran –todavía- al Revolucionario Institucional.

Extraña, sin embargo, que los marginados no hagan una “rebelión en la granja” o como “Fuenteovejuna” liquiden los modos abusivos del quehacer partidista y se atrevan a emprender sus propios caminos políticos donde ya está demostrado que la disciplina es una forma rebasada.

Pero allá “eos”…que no son capaces de advertir la vorágine electoral que se aproxima a paso veloz, donde hay zonas de oportunidad para la participación en la contienda del 2021 que exigen audacia, atrevimiento.

La participación política electoral va por senderos diferenciados donde los electores tienen capacidad para distinguir las ofertas genuinas, ciudadanos que rechazan los atavismos y los discursos gastados.

Entre lo más desgastado de la política figuran los partidos, todos, por eso hay siglas que se están abriendo para construir propuestas de ciudadanos sobresalientes en el terreno de lo social o el arte con el objetivo de mostrarse relativamente distintos y afianzarse en las instituciones del ejercicio del poder.

El PRI, según nuestra opinión, ha entrado en arenas movedizas y requiere con urgencia de reatas de salvación.