Las mujeres tienen una mayor intención de adquirir vivienda que los hombres, así lo establecen datos de Propiedades.com, donde casi el 60% de los de usuarios del portal inmobiliario pertenecen a este sector de la población.
Sin embargo, la adquisición de una casa o departamento sigue siendo un gran desafío para las mujeres, pues del total de viviendas escrituradas del país, ellas son propietarias de apenas la tercera parte (35%), según el Instituto Nacional de las Mujeres.
“Hay importantes avances y esfuerzos para que cada vez más mujeres tengan acceso a viviendas. Actualmente, ellas superan por 10 puntos porcentuales a los hombres en el número de visitas a nuestro portal, lo cual demuestra un gran crecimiento y también grandes retos en materia de equidad que involucra a todo el sector inmobiliario”, indica Leonardo González, Analista Real Estate de Propiedades.com.
Explica que uno de los principales desafíos que enfrentan las mujeres para adquirir una propiedad es la desigualdad salarial. Datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) refieren que en los últimos dos años la brecha salarial fue de 15%, es decir, por cada 100 pesos que perciben los hombres mensualmente, las mujeres ganan 85 pesos, lo cual representa una limitante al momento de comprar una casa o departamento.
El acceso a financiamiento
Otra gran barrera que enfrenta este sector está relacionado con el acceso a créditos. Aunque las mujeres registran menores niveles de cartera vencida, tienen un menor número de créditos hipotecarios. Apenas ejercen el 39% del total de créditos de vivienda, ubicándose 22 puntos porcentuales por debajo de los hombres, según cifras de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Leonardo González, explica que aunque existe un crecimiento en la adquisición de inmuebles para mujeres, es imprescindible trabajar en temas de financiamiento y apoyar a quienes laboran por su propia cuenta y están buscando acceder a una propiedad.
“La capacidad de compra de una vivienda puede verse afectada por factores como un historial crediticio limitado, poca capacidad de ahorro o inestabilidad laboral. Todo esto conlleva a nulos apoyos o que solo se pueda acceder a créditos de menor valor”, puntualiza el Analista Real Estate de Propiedades.com.