Gerson Gómez Salas
Estamos embroncados. Nuestro mundo esta detenido en el concierto de las naciones. Tampoco esta claro fuera del territorio nacional. Invadidos por duendes de la política, magos del deporte y serpientes de la salud pública.
Los figurines de feria mucho han crecido. Hasta el grado de constituirse en gigantes. Cero en pensamiento racional. Deficientes en conducta del bien común. Cada país tiene el suyo. Los hay de todos los colores. De extrema derecha con virulencia a permanecer adoctrinados en el supremacismo.
Abrir la caja de pandora. Nuestro televisor o los dispositivos movibles muestran a estos titanes. Hemos observado al Hércules Cubano. Ganador de cinco medallas de oro en lucha olímpica. Todas en diferentes ediciones. Es decir, en 20 años, el peso de una generación, nadie lo ha superado. Ni lo hará. Sus músculos podrían mover todo un país hacia adelante, incluso a la isla caribeña. No ha desertado. Le es fiel al pensamiento de Patria o Muerte. Interesante el patrocinio de la marca Adidas. El mismo usó Fidel hasta los últimos momentos de vida.
Las serpientes de la salud pública. Cuesta creer el moridero de la población mundial. En las gavetas solo existen pastillas para el dolor, cuando hay. Salud mental donde los médicos padecen de la enfermedad del siglo, la depresión. Eso visten DG y autos de alta gama. A dónde vamos a parar. Dice el cantante vernáculo.
Aun hay más. Asombre a sus conocidos. Vaya al mercadito del viernes. Ahí encontrara mucho del medicamento controlado a precio accesible. Nada mal. Original o pirata. La duda mata.
Vayamos mejor a perder el tiempo a la Black Deep Web. Tal vez encontremos iluminatis infiltrados. Reptilianas buchonas llegando de Venezuela o Colombia. Como las guías caseras para volarse la cabeza con una serie como la Casita en la pradera.