Por: Francisco J. Peña Medina
A seis días de ser esposada por la policía y desalojada del Palacio Municipal de Cadereyta, por provocar con preguntas incómodas al alcalde de MC, Carlos Rafael Rodríguez Gómez “El Cuate”, la reportera Ana Edith Ronquillo Herrera decidió presentar su queja en la Comisión Estatal de los Derechos Humanos ante lo que considera una violación a sus garantías individuales y un atentado a la libertad de expresión.
Alrededor de las 10 :30 de la mañana de este miércoles, por invitación de la periodista, Detona Insurgente la acompañó en exclusiva a interponer su denuncia en las oficinas de la CEDH ubicadas en el centro de Monterrey.

Ahi, mientras la directora del espacio de Internet Brujula Noticias, era atendida con la apertura del expediente oficial, por Angélica López, de la Dirección de Orientación y Quejas, de pronto arribó, en forma sorpresiva, Susana Méndez Arellano, presidenta de la dependencia estatal quien atendió y orientó personalmente a la reportera.
“Bienvenida, cuenta con todo el apoyo de la Comisión, aquí en la Comisión estamos trabajando mucho con Articulo 19, todo el tema de las transgresiones a los derechos humanos a personas periodistas y también trabajamos en 16 municipios, para dar orientación a policías y servidores públicos. Entonces es un tema muy importante para la Comisión que se respeten tus derechos a la información, entonces siéntete en confianza y en libertad de lo que tú manifiestes, nosotros estaremos al tanto “, manifestó a Ana Ronquillo la titular de Derechos Humanos en el Estado.

Después en entrevista para este medio de comunicación, Méndez Arellano afirmó que la CEDH, busca que casos como el ocurrido con la comunicologa el pasado viernes 14 de marzo, durante una sesión del Cabildo en Cadereyta disminuyan en Nuevo León y se respete el derecho a ejercer el periodismo libre.
“Y también que las autoridades y en estos casos los elementos policiales sepan los límites de su actuación para que esta relación entre personas periodistas y autoridades sea cada quien respetando tanto el derecho de ejercer el periodismo como los límites de la autoridad para respetar ese derecho “, expresó la funcionaria a este reportero.
Al terminar de integrar el expediente de oficio sobre su queja, Ana Ronquillo habló para Detona.
Agradeció el trato recibido en la Comisión de Derechos Humanos y dijo sentirse “arropada” por el organismo, contrario a la apatía que recibió de sus colegas de prensa de Cadereyta en donde ocurrieron los hechos y afirma: “en esa ocasión me sentí sola”.
“Con esto se fortalece la queja que ya se había presentado por oficio ante esta misma Comisión de los Derechos Humanos y se hace ejercer la solicitud del mecanismo de protección a periodistas y se hace evidente esta situación de la que fui víctima”, afirma Ronquillo.
Advierte, que esto apenas empieza pues próximamente presentará una denuncia penal en la Fiscalía General de Justicia del Estado, en contra de quienes resulten responsables.
“Yo pido que se realice una investigación con todos los funcionarios que estuvieron involucrados empezando por el alcalde, Carlos Rafael Rodríguez Gómez, su Secretario del Ayuntamiento, Carlos de León González, su Secretario de Ejecución Ejecutiva, Joaquín Bautista, su Secretarío de Desarrollo Social, Rosendo Garza Leal, que envió a su personal a su cargo a sacarme y Blanca Núñez (Secretaría de Participación Ciudadana) ahi están los videos “.
” Afortunadamente hay videos muy claros de quienes participaron en esta situación, también está involucrado Ismael Acosta, encargado del despacho jurídico pido una investigación y que se apliquen sanciones a los que estuvieron involucrados en esta situación por abuso de autoridad “, señaló.
Ana Ronquillo, aseguró contar con más de 16 años ejerciendo el periodismo, principalmente en medios de prensa del Estado de Chihuahua, su tierra natal y aunque reconoció sus simpatias con el Partido Acción Nacional, exigió no sacar de contexto lo sucedido durante aquel conflicto en el que fue expuesta como periodista al escutrininio público y pidió no seguir polítitzando más el caso.