Por Salvador Hernández LANDEROS
Para algunos priistas de la “vieja política”, la reaparición de José Natividad González Paras en un evento partidista les manifiesta un presagio fatal.
En la mente de esos viejos priistas vive el recuerdo de las dos campañas para gobernador, en 1997 y 2003, en las que participaron y que fueron nada gratas.
Ellos presagian que el futuro del PRIAN, principalmente para el tricolor, no es nada bueno y estaría en riesgo de desaparecer en NL por resabios internos.
Que se le mencione como coordinador, con bajo perfil, en los eventos que sostuvo Enrique de la Madrid, es un indicio que operará por encima del PRI.
Interpretan que tiene una misión ya encaminada por él mismo, de acuerdo a la insistencia de De la Madrid en sus mensajes, el buscar una alianza con MC.
Sus mensajes fueron claros y la labor de González Paras sería convencer a Samuel García, para formar una alianza, al menos, sólo en la presidencial.
Para el ex gobernador no será difícil dado su oficio político, aunado a la relación que tiene como asesor con el emecista desde el inicio de su gobierno.
La dupla formada por Nati y Samuel podrá funcionar al conjuntar capacidad (Nati) y popularidad (Samuel) en la que habría acuerdos políticos mutuos.
Para los viejos de la política, no pasan inadvertidos los resabios con los actuales dirigentes u operadores del PRI, llámense Rodrigo Medina o Ismael Cantú.
En la alianza Nati-Samuel los perdedores en el 2024, serían los candidatos del PRI y llegarían al congreso local los de MC para cerrar el sexenio actual.
El presagio de esos priistas, cargados en experiencias y años en la política local no es nada despreciable. Y predicen la pérdida del registro del PRI de NL.
Y que se cuiden otros priistas activos…la historia continuará.