Luz María Ortiz Quintos
Instituto Nacional de Consultoría Familiar

Bien por los candidatos que están caminando para conocer las necesidades reales de los ciudadanos, visitando a las personas en sus domicilios, conviviendo con ellos con toda clase de personas y de niveles socio económicos, y también los que están enfocados en la detección de necesidades; en las grandes áreas de oportunidad que existen en las colonias y municipios. Sin pretender ofrecer soluciones a problemas inexistentes y sobre todo que no están perdiendo el tiempo en desacreditar o hablar mal de los “rivales” al mismo cargo de elección popular al que se están postulando.
Como ciudadanos debemos construir sociedades de mejor convivencia y aplaudo los discursos propositivos, con propuestas que son factibles y necesarias.
Que el voto se gane por los candidatos con experiencia reconocida y comprobada que a pesar de ya haber estado en una posición pública no tengan deuda de cumplimiento en su labor anterior. Porque será muy difícil creerles que harán un buen trabajo, cuando los hechos demuestran lo contrario.
Y para los candidatos que están por primera vez en esta participación política, los podemos evaluar por su labor ciudadana. Por lo que hacían y han logrado.
Y para los candidatos del medio del espectáculo, ojalá que, si los votos los hacen ganar, se rodeen de un buen equipo de especialistas para hacer un buen papel.
Analicemos muy bien a todos los candidatos de nuestro lugar de residencia, conozcamos ¿quiénes son?, ¿cuál es su experiencia?, ¿cuál es fin de ser servidores públicos?, ¿cómo se conforma su familia?, ¿cuáles son sus objetivos y metas en el cargo a desempeñar? Entre otras inquietudes que podamos tener. Identificar quienes solo dicen lo que queremos oír, sin la intención de cumplir. Esto es más fácil de identificar para los que ya han desempeñado un trabajo anterior en la función pública y también en la función privada.
Finalmente es nuestro deber y nuestro derecho estar bien informados y saber qué personas serán las que nos representarán, saber elegir por convicción y no por conveniencia. O seguiremos pagando los platos rotos de la falta de participación ciudadana, de abstención al voto y dejarles el camino a las estructuras pagadas para ir a votar. Ya son muchas administraciones que nos quedamos con la frase de ahora sí, esta propuesta es diferentes…y vaya sorpresa que nos llevamos. Como dicen: “estábamos mejor, cuando estábamos, peor.” Necesitamos a los mejores perfiles de las opciones que tenemos y si hay, el reto es que sean los que ganen, ¡porque así ganamos todos!