Luz María Ortiz Quintos
Esta hecha para manipular el cerebro humano, los programas están diseñados para hipnotizar a la gente, para que actúen de cierta forma. “La televisión es para gente pobre” así lo mencionó un famoso empresario.
La televisión te está programando para que cumplas las metas de otra gente, se rompe el poder individual que se nos otorga y se lo das a alguien más para que tome las riendas de tu destino. La información entra en tu subconsciente y genera una programación mental.
La televisión alienta el uso de drogas, alcohol, tabaco, al presentarlos seductoramente.
Moldea relaciones perjudiciales; muestran como relacionarse con el sexo opuesto y recientemente también con el mismo sexo, y producir un consenso depravado en la cultura de sus semejantes.
La promiscuidad sexual llega a ser una parte normal de la vida, mientras las consecuencias: embarazos no deseados, enfermedades de transmisión sexual, el tormento interior por ataduras.
Si quieres ver televisión elige una película que te ayude a sentirte bien, o un programa que te agregue valor.