sáb. Jul 27th, 2024

Lorena Gurrola

¿Qué significa perder y qué significa ganar? No significa otra cosa más, que lo que a uno le dé la regalada gana; ganas cuando crees que ganas lo que crees que ganas y se pierde de una forma igualita. A veces parece que son las expectativas, esas lecturas de palmas que nos hacemos en esta suerte de lo que queremos y creemos que es ganar y perder, lo que determina todo.

Así por ejemplo si crees que ganas cuando aprendes, resulta que perder puede darte lecciones enormes, de manera que podrías terminar concluyendo que hay algo ganado, poco o mucho, pero cuando menos lo hay. Y entonces también podrás darte cuenta de que cuando persigues sueños y los logras, este triunfo ganado, también viene acompañado de algunas cuantas pesadillas, ganarse la rifa del tigre le dicen algunos.

Tras el ejercicio electoral del día de ayer, muchos creen que han ganado, muchos creen que han perdido, pero el tiempo tiene un acierto para aclarar mejor ese punto.

Si, muchos han ganado, pero mucha responsabilidad en sus manos, que bien, pasando el festejo y el sabor de las copas, debería de venir acompañada de una ligera preocupación, porque viene el tiempo de cumplir y de pagar, y esto de pagar la confianza últimamente a los políticos les viene, pero bien corto.

Si, muchos creen que han perdido, pero más adelante verán, que lo ganado en experiencia, en una gran cantidad de apoyo, que, aunque hoy no alcanzó para la victoria puede crecer en otra ocasión, más tarde será rentable para llegar sin tanto dolor a la candidatura; y llegar con el “te lo dije” que les entregará poder ver al de enfrente equivocarse, lo que le dará un buen aderezo al asunto.

En una de esas, tal vez si somos más listos, más necios y más consistentes, la derrota de hoy sea la victoria de mañana; y mañana que estén peores las cosas, porque pasa que pocas veces mejoran, se van a necesitar personas y manos más preparadas que ahora, que siendo un poco autocríticos y menos víctimas, puede que no lo estuvieras tanto.

Hay ocasiones también para saber ser feliz por los demás, hoy veo a amigos obtener un cargo con la voluntad popular y me inunda la esperanza de que harán un gran trabajo; entendiendo también que hay tiempos para todos, y si este es el momento de otros, pues es de celebrarse; más si se trató de un cambio de color y de género, con quien se tiene una deuda histórica y no solo de un cambio de estafeta consanguíneo.

Recuerda dimensionar, no te estés autoflagelando por derrotas que ni son tuyas, ni acosando a otros por victorias que tampoco lo son; sino que se trata de esos rencores sin sentido que abanderas como si te ayudara a sentirte mejor celebrar las malas condiciones de otros. No te olvides de agradecer, pero de corazón y no con un mensaje de texto hueco, a toda esa gente que se asoleó, desveló, y mal pasó por seguirte los pasos en la faena, a ellos esfuérzate por hacer que se sientan ganadores, son parte de una elite muy selecta de gente que aún lucha, que aún lo intenta.

Así que ya sabes, cuando pase el temblor échale ganas, que siempre hay algo bueno en lo malo y algo malo en lo bueno, y en ello la magia de la vida. En ese entendido ¿Ganaste o perdiste ayer?

Por Admin

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *