Por Rogelio Romero
Washington.- La administración del presidente Joe Biden creara un centro de inteligencia cuya principal misión será contrarrestar la injerencia foránea en el sistema de elecciones internas del país.
Esto surge a raíz de la llamada trama rusa donde supuestamente los organismos de inteligencia del Kremlin y hackers internacionales intervinieron el sistema de elecciones nacionales en el 2016, cuando contendían el entonces candidato republicano Donald Trump contra la ex senadora de Nueva York y ex primera dama presidencial Hillary Clinton.
El llamado “Centro Para Contrarrestar la Influencia Maligna Exterior” estará bajo supervisión de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional que coordina información con todas las agencias de espionaje estadounidense.
En un comunicado la dependencia señala que el principal objetivo del centro será enfocarse en la detección y entendimiento de las fuentes que generan este tipo de inteligencia maligna, así como contar con las herramientas y personal experimentado en el monitoreo de este tipo de problema.
La creación del centro de inteligencia para contrarrestar la intervención de aparatos o entidades de espionaje extranjero y hackeo del sistema electoral estadounidense es un viraje en la política de inteligencia que siguió el mandatario anterior Donald Trump.
Esto porque Trump supuestamente intentó en varias ocasiones frenar las indagatorias que realizaba el fiscal especial Robert Mueller, en cuanto al tema de la presunta intervención de la inteligencia rusa en las elecciones del 2016.
El ex mandatario estadounidense siempre que era cuestionado sobre el tema trataba de minimizar los reportes de inteligencia que alegaban que existían evidencias de intervención de espionaje foráneo en el sistema electoral estadounidense.
Por otra parte Biden desde su campaña había señalado que si llegaba a la presidencia, presentaría propuestas que reforzarían y fortalecían el aparato de inteligencia del país, para evitar que casos como este se presentaran de nuevo.